Lunes 11 de Octubre de 2010.- "Un grupo de mendocinas católicas fue agredido por mujeres pro aborto enardecidas", mientras que otras, también abortistas, se solidarizaron y las ayudaron.
Fuentes de la Iglesia en Paraná informaron a ElonceTV que "un grupo de mujeres que vinieron desde Mendoza para participar del Congreso Nacional de Mujeres fue agredido por otro, con golpes y tirando cosas".
Según se indicó, "mujeres del grupo Pan y Rosas agredió a mujeres católicas de Mendoza que vinieron a participar de un encuentro pluralista y participativo y están viendo que de esto no tiene nada. Fueron agredidas con gas pimienta, orina, huevos podridos".
"Varias mujeres fueron golpeadas y algunas inclusive arrojadas por las escaleras de la escuela. La señora María Benega de Murri, está en el Hospital San Martín y debieron ponerle un cuello ortopédico", afirmaron.
Desde la comisión organizadora se analiza hacer una presentación en sede policial debido "a las múltiples agresiones que sufrieron estas mujeres por el solo hecho de ser católicas. Fueron golpeadas, tiradas al piso y pisoteadas".
Además de la denuncia policial, aclaró también que "vamos a realizar una presentación en el INADI por la clara discriminación que sufrieron por el solo hecho de no pensar de igual manera".
La fuente organizativa que realizó declaraciones a ElonceTV dijo que "lo que sí quiero destacar ante todo, es que las mujeres abortistas, con quienes tenemos una postura diferente, fueron quienes de inmediato se solidarizaron con nosotros y fueron quienes nos ayudaron a salir del lugar donde estábamos siendo ferozmente agredidas".
"Enardecidas, descontroladas"
Asimismo, Silvia, una delegada del SUTE Mendoza, hizo saber a ElonceTV que “un grupo de mujeres de 'Pan y Rosas' se descontroló de una forma increíble. Nosotras estábamos dando a conocer nuestra postura en relación al aborto y se descontrolaron con una agresión muy grande. Algunas de nuestras compañeras fueron tiradas y arrastradas por las escaleras”.
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Expulsan del congreso a mujeres que se oponen al aborto
“Nos están echando. A empujones nos están echando”, relató una de ellas a través de su celular, en medio de un griterío.
"En cuanto decimos que estamos en contra del aborto, empiezan a gritar y no nos dejan hablar", contó la congresista, que junto a otras 24 mujeres fueron sacadas a empujones del aula una vez que se atrevieron a pronunciarse en contra del aborto.
En un aula donde debatían aproximadamente 90 personas, esta mujer que se opone al aborto estimó que las expulsadas por compartir su postura fueron aproximadamente 25, y las más exaltadas e intolerantes, que llegaron a empujarlas y romper vidrios de las ventanas, serían una quincena.
El XXV Encuentro de Mujeres se desarrolla en la ciudad Paraná y para este domingo fue anunciada una marcha que se da por descontado bregará por la legalización del aborto, desconociendo la postura de las congresistas a quienes se impidió exponer sus ideas y finalmente se las echó del debate.
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“Chicas, fíjense bien que no quede una sola católica en las comisiones”
Militantes de dos agrupaciones obligaron a retirarse a las mujeres católicas. "Fuera la Iglesia de los encuentros", postularon.
La tensión llegó demasiado lejos, el debate se fue de madre y las mujeres de la iglesia fueron literalmente expulsadas de la Escuela Sarmiento. Se debatía en comisiones el polémico tema del aborto en el marco del Encuentro Nacional de Mujeres que sesiona en Paraná, relata El Diario de Paraná.
"Fuera la iglesia de los encuentros", fue la consigna que esgrimieron, centralmente, las militantes de Pan y Rosas, que lucen el color lila, y las que se identifican con el anaranjado, del Partido Obrero. Ya en el pórtico de la escuela, a viva voz y a megáfono, repitieron la consigna durante el lapso de una hora. Dejaron un apretado paso para que fueran saliendo, una tras otra, todas las referentes de organizaciones católicas o las que llegaron por sí a manifestarse en contra del aborto.
"Chicas fíjense bien... –exhortó una treinteañera- que no quede una sola católica en las comisiones". En la expulsión hubo forcejeos, clima tenso, empujones, insultos a viva voz, cánticos.
Un grupo de las "lilas" y las "anaranjadas" ocupó luego el asfalto en calle La Paz ya cortada al tránsito. Una veintena de agentes, que sólo intervinieron para dar lugar al "desalojo" sin mayores incidentes, se hizo presente en el lugar. Un par de ambulancias se encargó de trasladar alguna herida sin gravedad, alguna mujer descompensada.
"Entren, intervengan", insistía un hombre en exhortar a un agente de policía a la represión. El agente le dio un insólito consejo: "Dígame, ¿no sabe que son zurdas?". El bigotudo le recriminó: "¿Y no se puede debatir?". "Pero dígame –insistió el uniformado- ¿por qué no va a debatir a otro lado?".
El de bigotes le cuenta a El Diario: "Están las abortistas agrediendo a nuestras mujeres católicas, las han pateado en el suelo, y la policía tiene órdenes de no intervenir. ¿A usted le parece". Una mujer desalojada, tucumana, busca el grabador para contar: "Me han tirado escaleras abajo, me expulsaron del taller, vengo de Tucumán, 23 horas en ómnibus", denunció. "Decidí participar porque me pareció muy interesante que las mujeres debatamos, pero como no estoy a favor del aborto me expulsan", se quejó para luego pedir ayuda para recuperar su cartera que quedó en el edificio escolar.
Más tarde, hubo una disidencia interna al encuentro. Lo expresó una "lila" desde el megáfono al decir que "el PCR (Partido Comunista Revolucionario) se va con la iglesia". En efecto, las referentes de esa fuerza política, que se expresa en organizaciones estudiantiles y sindicales, se retiraron molestas de la escuela. Manifestaron su desacuerdo con lo sucedido, cuestionaron la intolerancia y exhortaron a sostener el debate entre las mujeres.
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“La manipulación fue permanente”
Una de las participantes del Encuentro Nacional de Mujeres lamentó la manipulación. "La gente que no piensa igual es puesta en evidencia y es directamente sacada de los talleres", relató.
Mónica, una mujer paranaense, aseguró que "la manipulación fue permanente. La gente que no piensa igual era puesta en evidencia y directamente sacada de los talleres. Y en otros talleres hasta tiraron a una mujer por las escaleras. Quedaron tres mujeres católicas internadas", resumió.
Consultada por las roturas al edificio de la Escuela Sarmiento, Mónica consideró que "quedó muy dañada".
Expresó su asombro por cómo quedó el centro de Paraná luego de la marcha: "El centro está pintado entero. Se han arruinado negocios, han pintado bancos, se ha pintado el comercio. Un despropósito".
Aparte de los daños materiales, lamentó la imagen degradada de la mujer que se mostró. "Cuando uno tiene una imagen de mujer y ve hasta qué punto a veces se degrada esa imagen, te resulta increíble", reflexionó.
"Yo creo que se podría aprovechar una cosa así para realmente plasmar la opinión en defensa de los intereses de la mujer, lo que me parece muy interesante. Pero de repente uno se da cuenta que está muy manipulado", reiteró.
Con respecto al supuesto intento de un grupo de "ultra católicos" que habrían intentado entrar a la Escuela Sarmiento, Mónica explicó como otra versión de los hechos: "cuando tiraron a una mujer por las escaleras, ella avisa a un amigo de ella, conocido, para que sepan lo que les estaba pasando. Había tres mujeres que la estaban pateando en el piso. Entonces ahí vinieron para tratar de defenderla".
Fuente: http://www.elentrerios.com/
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Así sacan a las Católicas del Encuentro Nacional de Mujeres:
Al principio no se entiende, cerca del minuto 00:26 se ve claramente.
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